De la creatividad, a la creación: procesos de estampación.

Ya he hablado mucho de la parte buena de esto, ahora sigue la parte técnica. Mi intención no es convertirlos en expertos en estampar. La idea es que conozcan que métodos existen, para que sepan a que se enfrantan y que limitaciones tienen.

Hay muchísimas formas de aplicar estampados sobre superficies textiles. Las más comunes son: serigrafía, tampografía, manual y digital. Elegir entre las técnicas depende del tamaño de la producción, la cantidad de colores, y sobretodo, la composición del tejido.

En la serigrafía, se sacan un bastidor (un marco con un pedazo de seda con el diseño) por cada color, por es es recomendada para cuando se tienen 6 colores o menos. Se aplica una tinta (puede ser a base de agua o de aceite, según el uso final de la prenda) sobre el bastidor y esta pasa a la tela, osea que la tinta no penetra el tejido, sino que esta sobre este, y puede sentirse. Se repite el proceso por cada color que se tenga. No  se justifica usar este tipo de estampación cuando se hacen producciones muy pequeñas. Esta técnica también se puede aplicar sobre casi cualquier tipo de superficies, pues sus tintas tienen buena adherencia. Para producciones más grandes, se puede hacer serigrafía rotativa, que es básicamente lo mismo pero en vez de bastidores, se tienen rodillos con los diseños, uno por color tambien.

Diseño estampado por serigrafía, donde se usaron 3 bastidores diferentes, una por color:

La impresión digital es básicamente una impresora gigante con tintas que se adhieren y absorben en las telas. Permite pasar directamente el archivo del computador a la tela, logrando la mejor calida y definición en el estampado. Las debilidades de esto serian los costos altos y que no se adhiere tan bien a todas las telas. Hay que tener muy presente la composición del tejido, ya que cada uno absorbe las tintas de una forma diferente, lo cual puede afectar la calidad de la imagen y la absorción de los colores.

Una opción muy desconocida, pero en mi opinión la mejor para el universo de swimwear, es la sublimación. Es una especie de transfer, como cuando se planchaba una hoja especial sobre una camisa. En este caso, se imprime sobre un papel que a simple viste parece que hubiera quedado feo pues los colores se ven opacos y no se ven de buena calidad. El momento mágico es cuando se pone la hoja sobre la tela (que es este caso DEBE ser poliéster, ya que otras telas como el nylon o algodón se quemarían o derretirían) y se meten en una plancha gigante con altas temperaturas. El resultado es increíble. Se ve una calidad igual o hasta mejor a la de la impresión digital, y los colores se ven vibrantes. Está técnica no tiene limitaciones en el número de colores, pero como los papeles de sublimar tienen un tamaño máximo de 70x50cm.

Hay muchas otras formas, pero según mi corta experiencia, estas son las más importantes, y creo que con esta información tiene lo suficiente para defenderse y encontrar algo que se acomode a sus necesidades. Espero que les sirva la información y que puedan aplicarla!